Cómo Desarrollar la Empatía en la Familia: Un Ejemplo Práctico

(CNN) — Los jovenes que tienen relaciones próximas y seguras con sus familias son mucho más propensos a enseñar empatía con sus compañeros, según un nuevo estudio. Particularmente, en el momento en que los jovenes se sienten seguros, apoyados y conectados con sus progenitores u otros cuidadores mayores, tienen la posibilidad de transladar la empatía que reciben a el resto.

«No pienso que a los jovenes se les afirme especialmente qué llevar a cabo, y no pienso que vaya a marchar decirles a los jovenes que deben empatizar con el resto», ha dicho Jessica Stern, autora primordial del estudio y becaria postdoctoral en el Departamento de Psicología de la Facultad de Virginia. «Pero lo que marcha es mostrarles compasión y dejar que se la transmitan a la gente en sus vidas».

La relevancia de la empatía

La gente desarrollan la empatía desde la primera niñez.

La empatía pertence a las mayores habilidades humanas, con lo que se considera una cualidad, don o talento. Es esta cualidad la que le deja a un individuo ponerse en el sitio de otra persona y empatizar con sus sentimientos, conmuevas o la situación concreta por la que pasa.

¿Qué es la compasión?

La empatía es la aptitud humana de conectarse emotivamente con otros individuos, de poder sentir, admitir, comunicar y entender el padecimiento, la alegría o los sentimientos de la otra persona.

Es una característica muy importante en el accionar humano, frecuentemente considerada un valor, que está relacionada a la aptitud de ponerse en el sitio de otra persona y conectarse con sus pretensiones y comprender sus acciones. La empatía pertenece a lo que se conoce como sabiduría sensible y está relacionada a otros valores como la compasión y el altruismo, y se enfrenta al egoísmo y la antipatía.

Amplíe su vocabulario sensible

Ponerle nombre a los sentimientos de sus hijos es una increíble forma de hacerles entender que usted se preocupa por de qué forma se sienten, que está consciente y que puede asistirlos a entender. Por poner un ejemplo, si tu hijo chilla y patea en el momento en que deseas sacarlo de la tina, puedes asistirlo diciéndole: «Sé que gozaste jugar en el agua y que te enojas en el momento en que sales, pero es hora de cenar». .»

No tenga temor de emplear términos que desconocen o que no utilizan, por poner un ejemplo, frustración, decepción, emoción, celos. Es esencial que aprendan sobre opciones alén de «Me siento bien». o me siento mal”, puesto que esta es la base de la educación sensible que les dejará entenderse a sí mismos y a el resto.