si mi bebé vomita le vuelvo a dar de comer

1. Diferencia entre vómito y bocanada. Da igual si es un sinnúmero o si sale de forma fuerte. Si un niño expulsa el contenido de su estómago sin enseñar afecciones (malestar, mal, pucheros), es una bocanada. El vómito es en el momento en que la expulsión va acompañada de afecciones.
2. Deja de preocuparte bastante. Los vómitos son muy recurrentes en los pequeños. Y en la mayor parte de las situaciones no son graves.
3. No le des nada de comer ni de tomar en el transcurso de un tiempo. Si un niño devuelve y enseguida le volvemos a ofrecer de comer o tomar, su estómago tiende a expulsarlo nuevamente y se irrita mucho más. No le ofrezcas nada hasta el momento en que haya pasado por lo menos 30 minutos sin arcadas.
4. Dividir los tiros. En el momento en que vuelva a sugerir líquidos o alimentos, hágalo en pequeñas proporciones con mucho más continuidad.
5. ¿Con qué deberías iniciar? Empieze con comida o refrescos. Si está amamantando, es excelente llevarlo a cabo con él. Como la papilla tiende a ser blanda, puedes comenzar con cuanto quieras. Pero pequeñas proporciones.
6. Si no se admite nada, el médico debe valorarlo a la mayor brevedad. Un niño puede deshidratarse en escasas horas si devuelve todo cuanto come. Si los vómitos son intermitentes, devolver un tiempo y absorber la mayor parte podemos aguardar mientras que el estado general del niño no sea malo.
7. La complicación a tener en consideración es la deshidratación. Si prosigue devolviendo, el inconveniente es que está desecado. Tenemos la posibilidad de meditar que un niño está desecado si devuelve múltiples ocasiones consecutivas:
   1. Tiene la boca seca.
   2. La piel es pálida y las ojeras están marcadas. Esto en general va a suceder justo después de devolver. Pero si no has vomitado por un tiempo y se ve de este modo, es una señal de deshidratación.
      

1. Tiene la boca seca.
2. La piel es pálida y las ojeras están marcadas. Esto normalmente va a suceder justo después de devolver. Pero si no has vomitado por un tiempo y se ve de esta forma, es una señal de deshidratación.

Vas a ver a tus hijos despedir esa leche apaciblemente, aun sonriendo, sin plañir y sin mal. ¿CIERTO?

Bueno, estas son recaídas normales de pequeños. La única pega es que no tenemos la posibilidad de instruir el maillot nuevo que le obsequiaron por el hecho de que siempre y en todo momento transporta el dorsal puesto.

La leche no la enferma, no saltea las sobras, su estómago no es pequeño y no requiere mudarse a leche antirreflujo.

¿Es alarmante el vómito en los pequeños?

Hay que distinguir entre vómito y reanimación. Los pequeños con frecuencia devuelven por el hecho de que sus sistemas aún se están construyendo o pues no tienen la posibilidad de supervisar la proporción de alimentos que precisan. A pesar de que los vómitos tienen la posibilidad de ser mucho más sensibles, puesto que indican una complicación en el sistema digestivo o intestinal, fuertes alergias u otras adversidades médicas.

La regurgitación es común a lo largo de los primeros 3 meses de vida y por consiguiente es esperable en el desarrollo de nutrición de los bebés, puesto que son reacciones espontáneas al reflujo infantil. Son de poca cantidad y refulgentes o con transparencia, cesan en el momento en que el niño tiene 12 meses o antes.

¿Por qué razón se regeneran?

En el momento en que un adulto devuelve, acostumbra pasarlo mal, tras devolver le puede doler todo el cuerpo y acostumbra tener escasas ganas de comer cualquier cosa. En el momento en que un bebé regurgita lo realiza sin bastante esfuerzo, la leche sale como un mordisco y listo. La regurgitación tiende a suceder pues fueron bastante lejos y absorbiendo (donde tienen alguna contrariedad para succionar y, por servirnos de un ejemplo, toman leche rica en lactosa en demasía) o por la inmadurez de la válvula estomacal. Acostumbran a regresar a soliciar la mama y se la tenemos la posibilidad de prestar sin inconvenientes, puesto que no les va a hacer daño.

La aparición de la regurgitación acostumbra ocasionar asimismo enorme preocupación, en tanto que semeja no ser mucho más que leche: grumos de leche o leche cuajada, agua fría, leche con mocos… Es frecuente que todas y cada una estas peculiaridades estén habitual y no debe estar preocupados bastante. Si hace aparición sangre en las regurgitaciones y no tienes fisuras, es preferible preguntar al médico. Si la reanimación no interfiere su peso o confort, no tienen que preocuparse bastante, la mayor parte de los bebés se recobrarán a los 7 u 8 meses. Conque paciencia, una muda de ropa por si las moscas y una toalla sobre los hombros, que acostumbra socorrer la ropa de sobra de una calada.

Blw (Baby Led Weaning) O Baby Led Weaning

Si el pequeño cuenta la espalda como un reflejo mientras que come, el reflujo puede ser un inconveniente. Además de esto, los cólicos permanentes, la tos y el perder peso son otros síntomas a tomar en consideración. En la práctica, si la persona devuelve tras comer de forma incesante y repetida, es posible que sufra alguna afección.

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